Los 40 años en la calle del Johnny Rambo antofagastino

Por Rodrigo Ramos Bañados

¿Por qué los pacos persiguen a Johnny Rambo? ¿Acaso ignoran su pasado? Eugenio Segundo Ávila Galleguillos, de 52 años, de los cuales 40 años son trabajados en la calle, en el asfalto, como limpia autos y ninguno en la milicia, es quien se denomina como el “John Rambo antofagatino” y habla en tercera persona como el “Murci” Rojas o Martín Vargas. Este hombre de rostro de boxeador y alguna cicatriz se siente un personaje popular. Por esto se pone a la altura de “chico de las conchas”, a quien considera el número 1. El, precisa, está entre los Top Ten.
Esta vez aclaró que no se puso su tenida de G.I. Joe, o sea el cintillo en la sien, la estrecha chaqueta color verde oliva que le deja al descubierto las calugas en la guata y algunos otros detalles camboyanos, porque desde hace unos días es acosado por un Carabinero. No entra en detalles sobre la razón del acoso, sino que “le están haciendo la vida imposible y yo sólo quiero trabajar en la calle”, lanza como canción,
mientras limpia un parabrisas de un contundente 4X4, en la calle Sucre, entre San Martín y Latorre.
Mientras se desahoga de su drama del momento, un tipo que van un camión le grita algunos piropos. “John Rambo es famoso –dice- sin mirar al hombre que lo molesta”.
Explica que Rambo tiene un físico exuberante, un físico trabajado, gracias a la natación y después a las pesas y baldes con agua, aunque reconoce que en el último tiempo ha estado algo “flojo” por problemas a la columna, igualmente aprieta el bicep y sus tatuajes caneros se contraen. “Gracias a esto Rambo creó los músculos que tiene hoy, sin embargo la columna ahora lo limita. Hace poco lo atropellaron”.

Artista
¿Por qué John Rambo? No lo duda, “porque es mi artista favorito, mi ídolo de siempre, el artista que seguí desde Rocky”.
-¿Y John Rambo es bueno para los combos?
-Rambo es bueno para los combos, pero no se agarra a combo muy seguido porque es una violencia que sólo debe ocuparse en defensa propia. Cuando lo agreden debe reaccionar protegiendo su integridad, nada más, y eso ocurre muy seguido porque la gente de acá no tiene el criterio de aceptar a un limpiador de vehículo y lo miran como cualquier cosa.
-Entiendo que es necesario ser duro para trabajar en la calle
-Cómo en cualquier lugar. Acá Rambo muestra su trabajo y apego a este oficio, y así alimenta su casa y familia, además que ayuda a los minusválidos. Sube las cortinas y baja las cortinas (de los locales).
-¿Un superhéroe por lo de los minusválidos?
-Siempre es buena persona, amable con los que son amables con él.
-¿Cuándo dinero gana John Rambo limpiando autos?
-No es una cosa muy estable, hay días que son buenos para él y otros malos, pero se hace alrededor de 10 mil pesos si le pone empeño todos los días. Lo bueno que tiene amigos y clientes, personas que están con él y se portan bien, pero la mayoría son los “voy y vuelvo”.

40 años
-¿Cómo ha sido trabajar 40 años en lo mismo?
-Gracias a esto Rambo conoció Sudamérica y además trabajó en empresas importantes de la región como en el puerto, pero todo ha sido bueno. A los 12 llegó a la Plaza Colón, cuando existían los cisnes, los patos y todo eso.
-¿Hubo patos en la Plaza Colón?
-Si, eran grandes, pero después desaparecieron, deben habérselos robado los camboyanos.
-¿Por qué Rambo comenzó a trabajar tan joven?
-Porque mi papá era alcohólico y yo era el mayor debía hacerle empeño, debía entregar el sustento para la casa. Ahora lo hago para mi familia.
-¿Alguna tristeza?
-La muerte de mi hijo. El falleció cuando construyeron el mall. Sólo me queda un hijo.
-¿Y muchas mujeres siguen a Rambo, por el físico bien trabajado, algún martes femenino por ahí?
-Más o menos especialmente cuando John Rambo es John Rambo con su traje y cintillo, no como ahora que ando con ropa normal por esta persecución. Al final yo estoy trabajando, mírame las manos.
-¿Se toma su trago Rambo de vez en cuando?
-Como todo ser humano.
-¿Y en la población lo quieren?
-No pasa mucho porque en ese lugar reina la ley de la selva. La vida de Rambo es la calle, aquí trabajo, aquí tiene sus amigos, allá llega los fines de semana nada más a lavar la ropa.
-¿A Eugenio Segundo Avila le gustaría conocer a Stallone?
-Me gustaría conocerlo como persona, como artista. Sé que él no es muy grande, yo soy más grande que él.
-¿Y la Quenita Larraín no le gusta a Rambo?
-A Rambo sólo le gusta su señora.