"RAREZAS DIECIOCHERAS" por Rodrigo Ramos Bañados

Más raro que huaso en el desierto. Más raro que mapuche en Calama. Más raro que curanto en Taltal. Más raro que ramada vendiendo ron cubano a luca. Más raro que rodeo en la pampa. Más raro que cueca chora con chamanto. Más raro que el bife chorizo chileno. Más raro que rock latino o reggaetón en las ramadas. Más raro que ramadas en la Gran Vía. Más raro que colombiana atendiendo en las ramadas. Más raro que supermercado abierto a las 12 de la noche. Más raro que asado de perro vago. Más raro que arroz chaufa en el asado. Más raro que radio tocando música chilena. Más raro que comer sushi en el dieciocho. Más raro que anticucho vegetariano. Más raro que empanada sin repetición. Más raro que comer una Mac nifica en el “18”. Más raro que carretero sin Omeprazol. Más raro que caballo en la playa. Más raro que las shoperías del centro vacías. Más raro que huasa ecuatoriana. Más raro que limpia autos sobrio. Más raro que pebre con burbujas. Más raro que salir a correr a las 7 de la mañana en el “18”. Más raro que El Corralero en la fonda del PC. Más raro que 
hacer el amor después de un suculento asado.
Más raro (falso) que jugar juegos criollos una vez al año. Más raro que decir que San Martín libertó Chile. Más raro que tricampeón de rayuela. Más raro que retorcijón a las 4 de la mañana. Más raro que curado callado. Más raro que chunchule de goma. Más raro que urgencia vacía. Más raro que taxista paleteado. Más raro que aguinaldo de minero de la gran minería pos hombre, donado al Hogar de Cristo. Más raro que casa de citas con chilenas. Más raro que “El dos por cien” en el mall. Más raro que pericote en el centro. Más raro que playa sin contaminación. Más raro que empresario generoso. Más raro que Chile dependiendo de la agricultura. Más raro que hincha de Cobreloa relajado.
Más raro que el CDA jugando cinco años seguidos en primera. Más raro que Estadio Regional remodelando y con velódromo. Más raro que fundación de banco. Más raro que le den el nacional de literatura póstumo a Sabella. Más raro que minero en city car. Más raro que regrese James Bond. Más raro que el Dakar verde. Más raro que el kilo de tomate a 500 pesos. Más raro que la felicidad.